El Autor

1.973: Un gran año

En 1.973 se estrenan El Padrino y El Exorcista. AC/DC y KISS se forman como grupos; Queen y Aerosmith lanzan sus álbumes debut y Black Sabbath lanza su quinto y más significativo disco: "Sabbath, Bloody Sabbath". Manuel J. Antonio nace en el otoño de ese mismo año, en mitad de esa marea de acontecimientos que acabarían forjándole una imaginación desbordada y un gusto por el rock más oscuro y las historias con transfondo conspiranoico y sesgo paranormal

En su infancia humilde y errante, toma contacto con la literatura a través de Julio Verne y Emilio Salgari, y poco tardó en convertirse en un ávido devorador de todo tipo de cómics. Ya de pequeño, exhibía un pobre talento con los números, así que acabó convirtiéndose en un indolente estudiante de letras, leyendo, a veces por gusto y casi siempre por obligación, obras clásicas de la literatura universal que, en mayor o menor medida, le fueron dejando marca. Sin embargo, su irreverente dificultad para concentrarse, ha provocado que siempre disfrutara más escribiendo que leyendo.Y así, con un importante bagaje de obras y autores imprescindibles aun por leer, y con prácticamente todo por aprender, se lanzó descabelladamente a componer su primera novela allá por las postrimerías del año 2.010. Tras casi cuatro décadas empapándose de novelas, series y films de acción, aventuras, terror y ciencia ficción, al son del rock más contundente, estridente e histriónico, compone un argumento al abrigo de la ciencia ficción de corte conspiranoico y preapocalíptico: un macro proyecto literario de una complejidad y ambición desmedidas para un autor novel.

Fruto de un incansable trabajo a lo largo de cuatro años de interminables noches de escritura, alternando etapas de prolíficas fases creativas con rachas de pertinaz sequía de ideas, consigue finalmente alumbrar en octubre de 2.014 "El Calendario de la Extinción", su primera novela. Finalmente, el macro proyecto incial se abre con una novela corta para introcudir al mundo su compleja historia y, principalmente, para que su ansioso escritor se introduzca en el inhóspito mundo de la autopublicación. 

Dos años después, tras la agridulce pero, en general, feliz experiencia de interactuar con la heterogénea población del universo de las letras desde el controvertido punto de vista de un escritor novel autopublicado, vuelve el inconsciente con su segunda novela: "La Sinfonía del Caos". Esta, más amplia, más ambiciosa y más elaborada que su antecesora, estira el argumento de aquella para hilvanar una enredada trama que precipitará la conclusión de su macro proyecto literario iniciado seis años atrás; el cual, si su caprichoso imaginario no lo varía, culminará en dos nuevas obras ya (casi) terminadas.

Al margen de todo ello, otra novela en el cajón y varios bocetos más, garantizan que, por ahora, Manuel J. Antonio continuará amenazando al mundo con la elaboración de un extenso catálogo literario; el cual, a causa del influjo cultural durante el que tuvo lugar su embriogénesis, orbitará a ciencia cierta en las nebulosas de la conspiración y lo paranormal, al son del rock mas contundente, estridente e histriónico.